entrevista exclusiva con el doctor Fabra, el psiquiatra de la familia Costa!

Entrevista al doctor Fabra: "Conozco a Ric Costa desde que se llamaba Dorita".


Nos encontramos con el famoso psicoanalista doctor Fabra, castellonense universal conocido porque sus terapias conductuales inspiraron la entrañable novela de Anthony Burgess La naranja mecánica y el film homónimo de Stanley Kubrick. Después, gracias a sus contactos políticos, empleó terapias similares con conocidos responsables del PP valenciano con resultados sorprendentes: Se dice que sometió a Francisco Camps a una sesión de visionado de cincuenta horas de los discursos de Lluís Companys con la música de Els segadors de fondo, gracias a la cual, el por ahora presidente de la Generalitat es capaz de mantener una perenne y amplia sonrisa incluso cuando no es sodomizado. Pero el trabajo más importante que ha realizado el doctor Fabra ha sido con los Costa, una familia desestructurada y completamente marginada por la sociedad a la cual Fabra ha tratado con sus terapias tan personales, sin mucho éxito, dicho sea de paso.

Ahora, en exclusiva, el doctor Fabra nos habla de los entresijos de tan complejo tratamiento y de las vicisitudes de una familia tan poderosa de la política valenciana como peculiar.

Pregunta: Señor Fabra, ¿cuál fue el primer miembro de la familia Costa con el que usted trató?

Doctor Fabra: Hombre, miembro, miembro, no tenía. Se llamaba Dorita, Dorita Costa. Era una mujer alta, muy espigada, parecería una modelo si no fuera por esas orejas peludas que tenía y que se negaba a depilarse. Cuando llegó no podía hablar, estaba afónica y atemorizada, pero pronto descubrí cuál era la causa de sus males.

P: Cuéntenos...

R: La razón es que no podía soportar que su hermano Juan tuviera un amante a la que ella secretamente deseaba. Una persona importante, llamémosle Mariano.

P: ¿Un político?

R: Eso está por descubrir. El caso es que Dorita además padecía disforía de género, con lo cual le dije: Chica, ponte una buena verga y con ella puedes matar dos pájaros de un tiro.

P: ¿A riesgo de destrozar la relación que mantenía con su hermano?

R: Ya sabe cómo se las gasta este tipo de gente, hoy son amiguitos del alma y mañana si te he visto no me acuerdo. El caso es que Dorita se cambió de sexo y se hizo llamar Ric y recuerdo una cosa muy graciosa, que en su primera cita fueron al cine y vieron Caray con el mayordomo, qué largo tiene el maromo y Dorita, que ya era Ric, acabó diciendo: Pues caramba con Mariano, qué grande que tiene el...

P: Tal vez esos detalles no sean necesarios.

R: En todo caso, una vez rompió con Juan, vino a hacer terapia conmigo y le recomendé que se presentara a presidente para fastidiar al novio de Dorita – Ric, que era el otro competidor.

P: Y antes le había recomendado antes a Dorita – Ric que destrozara la relación con su hermano. Usted es un poco cizañero, ¿no?

R: Ya sabe, mientras haya pastuqui ganamos todos.

P: El resto de la historia ya la conocemos. Ric – Dorita le fue fiel a su amor y fastidió a su hermano Juan pero, ¿podría darnos algún detalle más que no sepamos?

R: Bueno, le puedo decir cómo son las nochebuenas. Una risa. Tengo que tener el teléfono encendido para ellos porque a veces llama el uno, luego el otro, les hago terapia exprés por separado, a veces incluso aparece Mariano. Les he propuesto hacer un trío, ya sabe que Mariano es un poco viciosillo, y hacerlo con dos hermanos es una de sus fantasías, pero los hermanos no quieren, como son un poco opusinos.

P: ¿Y los flirteos de Ric – Dorita con el movimiento okupa?

R: Él – ella ha desarrollado un extraño transtorno de personalidad según el cual cree que el tiempo no ha pasado, piensa que tiene el mismo trabajo como Secretario General, que Mariano sigue queriéndole, que el PP ganará las próximas elecciones, pero no es así. Sigue yendo todos los días al trabajo y la gente finge que sigue en él para que no le dé un colapso nervioso. Realmente no es un okupa, es un pobre diablo.

P: Y a todo esto, ¿cómo le va a usted con la crisis?

R: De puta madre, qué quiere que le diga, mientras todo el mundo está con sus escándalos, en Castellón robamos a capazos y como yo he colocado a todo el mundo en la provincia, todos callan como putas... putas... putas.... mmmm.

P: Como gestor público, usted tampoco tiene precio.

Samuel S.